Cuántas veces habremos mirado al cielo y habremos pensado “Esa nube tiene forma de…”.
El ilustrador ecuatoriano Javier Pérez también tiende a buscar semejanzas en objetos del día a día y ese ejercicio creativo le ha llevado a crear una serie de bonitas ilustraciones.
El proyecto me recuerda a cuando éramos pequeños y la imaginación era un compañero de viaje habitual con el que construíamos un mundo ideal en pocos minutos. De mayor es cierto que esa habilidad tiene a difuminarse y es una pena, está comprobado que usar la imaginación a cualquier edad aporta grandes beneficios a nuestra vida intelectual y emocional.
Por eso, me alegra conocer proyectos artísticos de este tipo que invitan a dejar fluir la imaginación, reactivan el chip creativo que todos tenemos dentro y nos animan a no conformarnos y ver más allá…
Para Javier los clips son trompetas, las uvas son globos o los tornillos son las púas de un erizo… Las simples trazas de un bolígrafo le son suficientes como para imaginar un mundo paralelo hecho a su medida.
Este divertido ilustrador sigue dándole al coco y está dispuesto a hacernos diariamente cómplices de sus obras en sus cuentas de Instagram y Behance.
Sencillamente precioso y preciosamente sencillo. Viviendo como vivimos en un mundo “hermético”, se gradecen dosis de imaginación como éstas que nos invitan a ver el mundo desde un nuevo punto de vista. 😀
———-
Posts relacionados:
Arte en el sándwich, cuando el envoltorio se convierte en una obra de arte
———-
¡Síguenos en Facebook y Twitter! 😀
———-
Pingback: Khiesti, otra creativa ilustradora que hace magia con objetos cotidianos | Marcando Tendencia
Pingback: Marty Cooper, una artista que reinventa el mundo a través de sus transparencias | Marcando Tendencia